Cantantes locales aprueban su participación en la apertura de cada jornada del festival
Pablo Obreque Echeverría
La apuesta que realizó el municipio de incluir a los artistas locales mediante votación popular fue una de las novedades que marcó la novena versión del Festival de la Leche y la Carne 2014, que concluyó ayer en la noche.
Fueron seis de los 18 cantantes que postularon para este concurso los que cumplieron el sueño de cantar ante un público masivo y "local".
La primera noche de festival se presentaron la cantante de rancheras Carolina Becerra, luego fue el turno del dúo compuesto por Juan Pablo Oyarzo y Carlos Peña, quienes presentaron baladas y cerró este ciclo el cantante Cristóbal Rilling, más conocido como "Tripp C".
El animador y cantante Juan Pablo Oyarzo comentó que "la experiencia fue muy positiva, porque es el escenario más importante de nuestra ciudad. Además, el público nos pidió otra canción, así es que interpretamos tres temas. Hubo mucho respeto y eso se valora".
Durante la jornada de ayer se presentaron en el escenario osornino el cantante John Eric Kramm, Javier González (doble de Marco Antonio Solís) y Rudy Toledo, quienes también destacaron el haber participado en este festival.
Al respecto, Kramm, quien interpretó dos temas, uno de ellos de Marco Antonio Solís, comentó que "los días previos al evento soñé con este momento y estoy muy contento del apoyo y de esta posibilidad".
El cantante Javier González comentó tras su presentación que fue un honor participar en uno de los festivales más importantes del país, gracias al apoyo del público que le dio sus votos para cumplir uno de sus sueños.
"El apoyo del público fue fundamental. Estoy muy feliz de haber participado y del reconocimiento. Tenía preparado un espectáculo mejor, pero por las bases no se pudo realizar. De todas maneras agradezco esta oportunidad", comentó González.
Mientras que el último artista que se presentó en el festival fue el charro Rudy Toledo, más conocido como Rudy Fernández, quien con su potente voz y apelando a un repertorio de clásicos de la música mexicana cautivó al público.
"Este es un sueño. Cantar en este festival es todo un privilegio. Esto fue gracias al apoyo que me entregó el público con sus votos. Me sentí bastante bien y cómodo en el escenario, porque fue como cantarle a mi familia", manifestó el cantante osornino que pertenece al Regimiento Arauco.
Sin embargo, no todas las opiniones fueron favorables. El cantante Cristóbal Rilling, por ejemplo, si bien se mostró contento por la posibilidad de estar presente en el escenario, dijo que se sintió perjudicado porque le acortaron su presentación a siete minutos y le impidieron mostrar un trabajo visual que en un primer instante se lo habían permitido.
"Me sentí perjudicado porque hubo mala voluntad de la persona encargada de la música. Además, el tiempo que tenía cada artista en un comienzo era de 15 minutos y lo recortaron a la mitad", comentó.
También dijo que para las próximas ediciones podrían cambiar las bases para que los artistas puedan presentar números más completos, complementándolo con baile y una puesta en escena mejor.
En este punto, los otros artistas coincidieron en señalar que este tipo de instancias se deberían seguir desarrollando para que otros músicos locales, al igual que ellos, tengan la posibilidad de subir al escenario.
"Fue muy positivo que hayamos tenido este espacio y ojalá que otros artistas tengan esta posibilidad en otras versiones del festival", comentó Juan Pablo Oyarzo.