El osornino Guillermo González junto a su familia acudió la tarde de ayer a la comuna de Puyehue para pasar una entretenida jornada y así aprovechar el intenso calor que se registró con fuerza.
Cuando se disponía a ir a la playa sintió el aroma de un asado, por lo que al llegar a la costanera de Entre Lagos y ver que se estaba desarrollando la Fiesta del Cordero, que organizó el municipio puyehuino, no lo pensó dos veces y se quedó a almorzar.
Ayer se efectuó la primera jornada de este evento donde acudieron centenas de personas a disfrutar de este exquisito plato, pero también de otros productos gastronómicos como empanadas, anticuchos y hasta cervezas artesanales.
"Veníamos con la idea de ir directo a la playa, pero vimos esta actividad y como la gente hacía los corderos al palo, no lo pensamos mucho y decidimos quedarnos a comer", dijo González, mientras esperaba ansioso su plato.
COMERCIO
En la feria participan productores que pertenecen al Programa de Desarrollo Local (Prodesal), procedentes de diversos sectores rurales de la comuna lacustre.
"En esta ocasión tenemos 50 expositores que representan a la comuna de Puyehue, los cuales se han unido para ofrecer un evento de gastronomía de primer nivel", comentó el alcalde José Luis Queipul.
En total, durante ambas jornadas se comercializarán más de cien corderos, 40 que serán hechos como asados al palo y los restantes vivos, para que la gente que desea consumir la carne de este animal pueda comprar y elegir el que desea llevar.
"En esta feria los productores tienen un espacio para vender sus animales. Por eso invitamos a la gente a que la visite", agregó Queipul.
De hecho, los precios para quienes desear asistir hoy a esta fiesta están al alcance de todos los bolsillos, ya que por ejemplo un anticucho tiene un valor de mil pesos y un plato de cordero con papas y ensaladas vale $3.500.
"cordero-chivo"
Una de las anécdotas de la primera jornada del evento gastronómico y cultural fue la venta de un animal llamado, según su dueño, el "cordero-chivo", una supuesta cruza entre ambos animales.
"Hace un par de meses fui a la feria en Osorno y una persona me las vendió con este nombre, por eso la estoy vendiendo así. Compré seis hembras", comentó el comerciante Rodrigo Sepúlveda.
Sin embargo, el técnico agrícola, Héctor Obando, quien se encontraba en la fiesta, echó por tierra la teoría de esta "nueva especie", indicando que "no se puede dar esta cruza por la línea genética, ya que las ovejas tienen 54 pares de cromosomas y los chivos poseen 60, por ende son incompatibles genéticamente", detalló el profesional.