La presencia en Osorno el miércoles último del destacado trompetista de jazz Cristian Cuturrufo y cuarteto, que deleitó con su música a más de 250 personas en el Aula Magna Monseñor Francisco Valdés Subercaseaux, ha sido una de las actividades culturales más importantes que se han desarrollado durante el año.
Pero esta presentación que organizó el Centro Cultural Sofía Hott no fue fruto del azar. Este espectáculo de primer nivel se hizo posible gracias al apoyo que la empresa Frigosorno efectuó en el marco de la Ley de Donaciones Culturales, mecanismo que estimula el respaldo de empresas o personas para el financiamiento de proyectos artísticos y culturales.
Y si bien en Santiago y en regiones como la de Antofagasta esta ley ha adquirido mucha fuerza -ya que existen empresas con recursos e interesadas en financiar este tipo de instancias- en Osorno la utilización de esta norma está prácticamente "en pañales".
Lo anterior, a pesar de que existen diversas organizaciones que podrían recibir esos recursos para desarrollar su labor, como la Corporación Cultural, Museo de Artes Visuales Surazo, la Casona Cultural Francesa y el Centro Cultural Sofía Hott. Y sólo este último ha sido beneficiado con esta ley, lo que refleja que hay un gran espacio para aumentar las sinergías en la materia.
REALIDAD
El director del Centro Cultural Sofía Hott de Osorno, Jorge Zepeda, comentó que "es importante que los privados puedan apoyar este tipo de actividades. La Feria de Osorno (empresa matriz de Frigosorno) apostó por nosotros y lo valoramos mucho, pero la idea es que otras se vayan sumando para generar una red de apoyo importante por el bien de la cultura local".
Mientras que el alcalde de Osorno Jaime Bertín, quien es el presidente de la Corporación Cultural de Osorno, indicó que "nosotros recibimos apoyo de entidades privadas en temas puntuales, pero no amparados en la Ley de Donaciones. Por ello, tenemos la intención de acercarnos a las empresas para trabajar de manera conjunta y potenciar aún más la cultura en Osorno".
Según Albertina Marambio, presidenta del Museo de Artes Visuales Surazo, las compañías muestran poco interés en apoyar iniciativas locales, porque prefieren apostar en áreas diferentes como el deporte, por ejemplo, o bien en eventos que sean masivos y donde ellos tengan mayor figuración en los medios de comunicación.
"Si las firmas quisieran aportar, se acercarían a nosotros, pero la realidad es que no existe un interés de apostar por la cultura porque tienen otros intereses", comentó la presidenta del museo.
APOYO LOCAL
El director regional del Consejo de la Cultura, Alejandro Bernales, comentó que gran parte de las actividades que se desarrollan son financiadas por este organismo, por los propios municipios y a través de los recursos del 2% asignado a cultura en el Fondo Nacional de Desarrollo Regional (Fndr).
"Necesitamos que las empresas apoyen las iniciativas y que vean que tiene que existir más responsabilidad social empresarial", comentó Bernales.
Eso sí, destacó que hay empresas e instituciones que por su cuenta realizan eventos culturales masivos que son un aporte a la cultura. "Queremos que se apoyen proyectos que nacen de la región. Es ahí donde se debe cambiar el switch", recalcó el director regional del Consejo de la Cultura.