Lagos pide quitarle el grado de general al ex jefe de la Dina
DD.HH. El Gobierno respondió que el ex Mandatario debió haberlo propuesto cuando estaba en La Moneda.
La insistencia en que no existen detenidos desaparecidos y de que el organismo que dirigía no cometió torturas, son razones para quitarle su grado de general al ex jefe de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), Manuel Contreras, según dijo ayer el ex Presidente Ricardo Lagos.
"O él vive en un mundo imaginario o su cinismo es absoluto, pero eso ya supera los límites de lo creíble", afirmó el ex Mandatario en una entrevista a radio Cooperativa.
"Yo creo que ahora, después de esas declaraciones, lo que va a estar en cuestión es decir: ¿Qué hacemos con este señor? ¿Sigue siendo llamado general del Ejército? (...) Me parece a mí que lo que ha ocurrido ahí no es propio de un general en retiro", agregó, pidiendo "analizar" otros casos de ex militares involucrados en violaciones a los derechos humanos.
Manuel Contreras negó esta semana en varias entrevistas la existencia de centros de torturas y que agentes bajo su mando hayan incurrido en prácticas de este tipo contra opositores al régimen militar.
El ex jefe de la entidad cumple condenas que suman 400 años de cárcel por decenas de casos de apremios ilegítimos.
Contreras dijo que todos los muertos atribuidos a la DINA fueron muertos en "enfrentamientos" y aseguró que no existen detenidos desaparecidos, pues, según él, los cuerpos fueron entregados en su momento al Servicio Médico Legal (SML), que dispuso sus entierros en fosas comunes del Cementerio General de Santiago.
La ministra vocera de Gobierno, Cecilia Pérez, insistió ayer en restarle credibilidad e importancia a los dichos de Contreras.
Además, criticó a Ricardo Lagos por su planteamiento. "Sus reflexiones debió haberlas hecho cuando fue Presidente", comentó la ministra. Añadió que una eventual degradación es una materia que decide el ministerio del Defensa, pero señaló que se ha pensado hacerlo.
Exclusividad
sin plazo final
El pleno de la Corte Suprema señaló ayer que los ministros que ahora tendrán dedicación exclusiva a causas de derechos humanos no tendrán plazo final para desarrollar su trabajo. Además, aclaró que la medida regirá sólo para los jueces en Santiago, por la sobrecarga que tienen.