Los 40 años del 11 de septiembre
"La villanía impulsa a los ejecutores a sepultar y luego a desenterrar a las víctimas".
Los recuerdos del Golpe Militar en Chile, ha estremecido las consciencias de la humanidad. Atrocidades no reveladas. Que nadie esperó y comentan medios del planeta sobre el "Hitler" chileno.
En los informes Rettig y Valech leemos torturas y ejecuciones de mujeres embarazadas; de otras, tras la vejación tuvieron una hija que han mirado con los gestos del asesino en el rostro. Los flageladores les arrancaron las uñas con alicates, así también los dientes. Aplicación de electricidad en los pezones, genitales, orificios, lengua, asfixia seca y en aguas con excrementos. Palizas de todo tipo, "teléfono", para romper el oído, en sangre y producir sordera. "Parrilla" eléctrica, atadas a somieres. Colgamientos. El terror no visto por nadie de las generaciones siguientes en alguna película.
Hay menores de edad muertos, incluso de 10 años. Secuestros. Cuerpos vivos -amarrados a rieles- al mar y a los volcanes. La villanía impulsa a los ejecutores a sepultar y luego a desenterrar a víctimas para evitar las pruebas. Los documentos que cito están avalados por el Estado y la Iglesia y son de absoluta probidad. Daños físicos y síquicos para siempre en quienes sobreviven.
En Osorno, utilizan de campos de concentración: dos empresas y recintos: Felco y Coopresur, Estadio Español, Cañal Bajo, Regimiento, Hospital Base, Comisarías. E investigaciones. Allí, estuvieron martirizados, médicos: Honorato, psiquiatra, el doctor González, profesionales bancarios, ingenieros, profesores, artistas, el señor Jean Martabit, que por su altura y resistencia física soportó, mas, nunca en el resto de su vida pudo dormir sin luz, pues la pesadilla se reiteraba.
Alumnos del Liceo de Hombres (Lero, ahora), fueron asesinados, su presidente, el querido chico "Rosas", a los 16 años de edad. De las aulas, Gustavo Salvo, a quien exilian, en compañía de destacados estudiantes. Allende logró cumplir sólo la mitad de su mandato. Tuvo éxito en planos sociales: Inversiones históricas en salud, educación, en fortalecer los sindicatos, en pensiones, dar trabajo a cada chileno. Luchó por la igualdad de oportunidades. Nacionaliza el Cobre, acude a las Naciones Unidas, aclamado por la audiencia mundial de pie.
El régimen militar, comienza quemando libros y matando a artistas. La dictadura privatiza la educación, la salud, las pensiones, el trabajo a cifras tan bajas, como el 30% de desempleo. La Unidad Popular evidencia que no es posible una revolución por vía pacífica. El país requiere hoy los medios básicos, en democracia y libertades plenas.